
En este sentido los demócratas, que bloquearon con éxito los fondos para el muro en el presupuesto suplementario del 2017, consideraron los fondos para el muro un dispendio.
Los mil 600 millones de dólares financiarían la construcción de un número indeterminado de kilómetros de barreras físicas y diques a lo largo de la frontera suroeste de Estados Unidos, lo que cubre al 100 por ciento la petición presupuestal de Trump.
Además los republicanos asignaron 100 millones de dólares para contratar a 500 nuevos agentes de la Patrulla Fronteriza, 131 millones para nueva tecnología fronteriza, 106 millones para naves y sensores y 109 millones para equipo no intrusivo.
La Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), que tiene a su cargo la detención y deportación de inmigrantes indocumentados, recibiría siete mil millones de dólares, un aumento de más de 600 millones de dólares en comparación con el presupuesto aprobado en el 2017.
También se incluyen 185 millones para contratar mil agentes adicionales y 600 ayudantes; dos mil millones de dólares para investigaciones nacionales e internacionales sobre tráfico de humanos, explotación infantil, crimen cibernético, tráfico de drogas y revisión de visas.
La propuesta de los republicanos requiere ser aprobada primero por el comité, después por el pleno de la Cámara de Representantes y más adelante conciliada con la versión presupuestal del Senado, un proceso que puede demorar aún varios meses.