SOMETIDOS A TROMPADAS
Por Joel Campillo García
Primero que nada empecemos diciendo que se les advirtió desde antes, pero no de esta campaña, sino desde la campaña de 2016, en aquel entonces el presidente Trump baso su mensaje lanzando improperios hacia México y su tradición migrante, la cual ayudo a construir la nación que es hoy, las ofensas pasaron desde los ataques a los mexicanos que viven en la Unión Americana, hasta los que estaban por llegar, alegando que México solo enviaba puros delincuentes y todo lo que en México no queríamos, en ese entonces encontró un enemigo común en los migrantes que ingresaban por su frontera sur.
En aquellos ayeres parecía fácil descifrar las intenciones de Trump, es una clase de primer semestre de Ciencia Política, para unificar un pueblo encuentra una amenaza externa, un enemigo común y en medio de una crisis económica, los migrantes son un claro blanco para los discursos que buscan culpables en el sistema, la falla en la matriz que buscaba el presidente electo en 2016 se llama “migración”.
Y el resultado en ese entonces fue tan potente, que, así como le consiguió una clara victoria contra una poderosa contrincante, como lo fue Hillary Clinton, también le dio una caída estrepitosa en 2020, pero dejo una marca en una amplia base de seguidores que se mantuvieron fieles y que no quedaron satisfechos con un solo periodo de mandato de su líder y con señalamientos de fraude en la elección que dio la victoria a Joe Biden, prometió volver y terminar el trabajo empezado.
EL JUEGO DE VERDAD O TRUMPADA
¿Pero que le falta terminar a Trump? Bueno, parece obvio, pero no lo es, J. D. Vance, Vicepresidente Norteamericano no ha tenido empacho para declarar que en México se vive bajo un Narco-Estado y además en este mismo saco incluye las débiles medidas por parte de Canadá para detener el tráfico de drogas desde China.
¿Drogas, fentanilo, ese es el nuevo enemigo? Pues en realidad es el pretexto, desde hace más de 20 años México tiene una balanza comercial a favor contra Estados Unidos, pero esto, ¿qué tiene que ver con las drogas, con la balanza comercial y con los aranceles? ¡Ah verdad! Pues todo está relacionado y en este nuevo episodio a nuestro paladín de la democracia y defensor de los trabajadores de América, bueno, al menos de los que están entre el Río Bravo y las Cataratas del Niagara y entre el Océano Atlántico y Pacífico, se le ocurrió tener una nueva estrategia para poder unificar a un país sumido en una crisis económica y social, con jóvenes involucrados en balaceras escolares y problemas de drogadicción.
Entonces ¿Es México el enemigo de Estados Unidos por llenar al país con drogas introducidas por los carteles? No lo es, esa es la respuesta, pero como lo dijo en su discurso del pasado martes, México tiene miedo de que se le imponga aranceles y por eso hará todo lo que Estados Unidos necesite o lo que es lo mismo en este momento, lo que Donald Trump necesite.
Y este Donald Trump versión 2.0, en más de una ocasión ha mencionado y ha reiterado que el mundo abusa de Estados Unidos y con eso se refiere a que explotan y se benefician en exceso de América, en su mala entendida percepción del mundo, la crisis que atraviesa nuestro vecino del norte se debe grandemente a una mala distribución del capital americano, el cual se ha salido el territorio estadounidense y no ha podido fortalecer su mercado interno, por ello su mensaje es el de “HACER A AMÉRICA GRANDE OTRA VEZ”.
Durante los próximos cuatro años seremos testigos de cómo el trompismo y las trompadas serán la base en la cual se iniciarán todos y cada uno de los procesos de negociación con todos los socios o aliados que Estados Unidos ha tenido históricamente y que a partir de ahora se redefinirán las relaciones a través del ejercicio del poder, delegando a la política y a la diplomacia a un plano secundario en función de los intereses económicos del grupo que garantice el triunfo electoral.
EL MODELO DE HARRY EL SUCIO
Parece increíble que ya ha entrados en la segunda década del siglo XXI, nos encontremos con que el uso excesivo de la fuerza contra quienes no son capaces de manera individual de defenderse, sea la manera en que se practicará la política moderna, sorprende que aquel país orgulloso de su construcción a partir de los padres fundadores, que no son otra cosa que un grupo de migrantes, ahora sea un ejemplo, desde su gobierno, de violencia y políticas proteccionistas, incapaces de generar mejores condiciones a sus ciudadanos a partir de la innovación y de políticas públicas y económicas que satisfagan una necesidad de estabilidad.
Este juego del policía bueno y el policía malo en el que nos está envolviendo la Casa Blanca, donde un día sale el presidente con grandes amenazas a sus socios comerciales y al otro día los integrantes del gabinete se dedican a dar falsas esperanzas e intentar suavizar el mensaje con promesas que se basan única y exclusivamente en satisfacer peticiones inalcanzables, o en el mejor de los casos solamente son placebos que no ayudan a mejorar las condiciones de la relación bilateral o de alguna región.
¿SI SEMOS SOCIOS?
La pregunta es válida, nuestro vecino es nuestro socio o nuestro enemigo, porque que constantemente nos esté cuestionando sobre nuestra calidad moral, legal, social o económica, ya no es un tema Menor, ya es un tema que enfoca al mayor socio comercial de cada lado, la industria automotriz mexicana no es tema menor para el socio del Norte ni para nosotros la industria agropecuaria es un tema y el que debamos apartar la mirada.
Son muchos los vínculos económicos, políticos y sociales por los cuales sí se debe mantener una relación cercana con la frontera norte, pero también se debe tener en cuenta que las ventajas económicas que durante los últimos años nos han beneficiado, también son las señaladas en este momento desde el otro lado de la frontera, para denunciar y con ello intentar socavar nuestras ventajas económicas y minarlas hasta el punto que se tengan que renegociar, nuevamente por una visión corta y clientelar que antepone el interés de unos cuantos sobre el desarrollo regional.
En todo esto solo hay dos verdades claras, una es que a ninguno de los países le parecen correcto la aplicación de aranceles de esta manera tan arrebatada y violenta y que con ello todos y cada uno de los actores económicos y políticos tendrán que hacer lobby afuera de la oficina oval y la segunda, que todo el aparato de estado en todos los niveles en la Unión Americana dan por hecho que en México se vive un estado de sitio por un gobierno invadido por el Narco y que solo faltaba que alguien se animará a denunciarlo públicamente para que se volviera una verdad pública.
